El cine nos deja planos: Las primeras historias

Edwin S. Porter: A Life of American Fireman, 1903

Inspirados en el vodevil, los primeros programas ofrecían una variedad de entretenimiento. Las películas raramente contaban con más de un plano, y cuando había varios, el exhibidor decidía si se mostraban de forma individual o consecutiva. Estos filmes podían ser reportajes sobre temas de actualidad, que mostraban escenas cotidianas, recreaciones de hechos coetáneos o sencillas ficciones.

Mientras los hermanos Lumière se centraban en documentales de viajes, cineastas como Georges Méliès o Edwin S. Porter experimentaron con la narración de historias. Méliès creó un estudio donde llevó a cabo avances en ilusiones. Porter, que trabajan para Edison, amplió los límites de la narrativa con su A Life of American Fireman, que pretendía una secuencia relativamente complicada de planos, incluido uno de uno bombero "imaginarios" (en superposición) un incidencio. También introdujo el uso de intertítulos en el cine estadounidense.